Es un organismo internacional que agrupa a las máximas autoridades supervisoras de la actividad de seguros de Latinoamérica. En este organismo participan 21 países, 19 países latinoamericanos como miembros de pleno derecho y dos (2) miembros adherentes, España y Portugal.
El año 1979 se aprobó el Estatuto para la creación de ASSAL, en la ciudad de Buenos Aires, Argentina; sin embargo esta iniciativa no se concretará hasta 1991, en la II Asamblea, en la que participan 18 países de América Latina. En el año 2009 ASSAL obtiene personalidad jurídica bajo la legislación chilena, cuyo nombre legal es Corporación Asociación de Supervisores de Seguros de América Latina, ASSAL.
Los cuatro principios básicos que deben adoptar las entidades de seguros para combatir el Lavado de Dinero son:
Dar cumplimiento a las leyes en contra del lavado de dinero.
Conocer a sus clientes.
Cooperar con las autoridades legales, de supervisión de seguros y otras autoridades de investigación y supervisión.
Implementar políticas contra el lavado de dinero, procedimientos y programas de entrenamiento en la materia.