A diciembre de 2022, el sistema de seguros peruano estaba formado por 17 compañías, las cuales gestionaban inversiones valorizadas en S/ 59.8 mil millones, equivalente al 6.4% del Producto Bruto Interno (PBI) nacional. Asimismo, en los últimos seis años, el total de las inversiones ha experimentado un crecimiento anual promedio del 8.7%, lo que evidencia la creciente importancia de este sector.
Considerando que el mercado de valores peruano aún se encuentra en proceso de desarrollo, la regulación de las inversiones locales y en el exterior de las empresas de seguros juega un rol importante en el crecimiento sostenido del sector, fomentando que estas sean solventes y busquen la protección de los intereses de los asegurados.
Al respecto, el presente artículo examina los cambios más relevantes observados durante los seis años posteriores a la emisión del reglamento de inversiones de las empresas de seguros, aprobado por la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS) mediante Resolución N.°1041-2016 y sus modificatorias (reglamento de inversiones).
Impacto sobre el proceso de la toma de decisiones de inversión
El reglamento de inversiones tuvo como objetivo reforzar la adopción de las mejores prácticas e incorporar estándares internacionales, principalmente los Insurance Core Principles emitidos por la International Association of Insurance Supervisors (IAIS), con la finalidad de fortalecer la gestión de las inversiones en el sistema asegurador peruano.
Así, el reglamento incluye aspectos como la estructura y las responsabilidades de la dirección, los comités, las unidades operativas y los procedimientos relacionados con la gestión del proceso de inversión y la gestión de riesgos de inversión. Al respecto, la alta dirección y la gerencia son responsables de crear políticas que estén alineadas con los estándares de la gestión de inversiones; mientras que los comités supervisan y toman decisiones informadas sobre inversiones y riesgos. En el caso de las unidades operativas, estas deben cumplir con requisitos y funciones específicas para gestionar diferentes portafolios de inversión, según los productos de seguros ofrecidos por las empresas; así como evaluar los riesgos de mercado, crédito, liquidez, inmobiliarios y operacionales de tales inversiones.
En cuanto a las posibilidades de inversión, el reglamento establece mayor flexibilidad para la inversión en una amplia gama de activos, acompañada de mayores requisitos prudenciales y la incorporación de límites de inversión que buscan una mayor diversificación de los portafolios. En ese sentido, se incorporaron nuevas modalidades de inversión como los instrumentos bimoneda, los productos estructurados con capital protegido y los fondos alternativos, entre otros.
Asimismo, se elevaron las exigencias para la presentación de información detallada de los portafolios de inversión, lo que permite reforzar el proceso de supervisión preventivo y tomar medidas oportunas frente a los riesgos emergentes que puedan poner en riesgo los índices de respaldo de las obligaciones y la solvencia. A lo largo de estos seis años, este proceso ha demostrado ser altamente efectivo, permitiendo superar coyunturas de estrés como el estado de emergencia nacional, por la pandemia del Covid -19, y los periodos de inestabilidad de los mercados financieros a nivel global.
Impacto sobre la composición de los portafolios
En cuanto a los emisores de los diversos tipos de activos que componen el portafolio de inversiones, se observó un aumento del 40%. Este incremento se registró principalmente en emisores de bonos y fondos (mutuos y de inversión), como se ilustra en la tabla N.°1.
Tabla N.°1
Cantidad de emisores por tipo de activo (2017 vs 2022)
Fuente: datos reportados por empresas de seguros a la SBS
Asimismo, la actualización del reglamento de inversiones permitió un incremento importante en fondos (mutuos y de inversión) e inversiones inmobiliarias, que en conjunto representan el 13.4% del portafolio total al cierre del 2022.
Con relación a la inversión en fondos, esta experimentó un notable crecimiento durante el período de análisis, elevándose a nivel del sistema de S/ 494 millones a diciembre de 2016 a S/ 3,518 millones a diciembre 2022, lo que representa una tasa promedio de crecimiento anual de 39%, por encima de la tasa anual de crecimiento del total de inversiones para el mismo periodo (8.7%). Ver gráfico N.°1.
Gráfico N.°1
Fuente: datos reportados por empresas de seguros a la SBS
Es importante destacar que, en los dos años posteriores a la publicación de la normativa, la inversión en fondos a nivel del sistema asegurador experimentó una tasa de crecimiento anual de 86%. Dicho incremento puso de manifiesto el creciente protagonismo de los fondos de inversión en comparación con los fondos mutuos en los años recientes. Durante el año 2022, estos vehículos de inversión representaron 4.4% del portafolio total del sistema asegurador, mientras que los fondos mutuos el 1.4%. En el caso de los fondos de inversión, los rubros que destacan son los Exchange Traded Funds (ETF) (S/ 988 millones), fondos de inversión de acreencias en general (S/ 803.4 millones) y fondos de inversión de financiamiento a proyectos de infraestructura (S/ 330 millones). En el caso de los fondos mutuos, predominan aquellos en los que sus subyacentes son principalmente títulos de deuda (S/ 552 millones).
Por otro lado, la inversión en inmuebles también tuvo un importante despegue tras la entrada en vigencia del reglamento de inversiones. En el período comprendido entre 2016 y 2022, esta inversión aumentó significativamente en el sistema, pasando de S/ 1,681 millones a S/ 4,475 millones. Esto representa una tasa de crecimiento promedio anual del 18%, superando la tasa de crecimiento anual del total de inversiones mencionados anteriormente. Al cierre del año 2022, la inversión en inmuebles representó el 7.5% del portafolio total (ver gráfico N.°2).
Gráfico N.° 2
Fuente: datos reportados por empresas de seguros a la SBS.
El aumento de la inversión en activos no tradicionales antes descrito ha contribuido a aumentar la diversificación de las carteras, debido a que exhiben una menor correlación con las inversiones tradicionales (efectivo, bonos y acciones). Esta ampliación de las alternativas de inversión ha sido implementada sin sacrificar los requisitos prudenciales necesarios para la inclusión de estos activos en los portafolios de inversión.
Próximos pasos
En los próximos años, la SBS continuará impulsando mejoras en el marco regulatorio aplicado a las inversiones de las empresas de seguros, al mismo tiempo que mantiene la mejora continua en sus enfoques y técnicas de supervisión basada en riesgos. Este compromiso tiene como objetivo principal acompañar el crecimiento del mercado de seguros para una mayor protección de la población y promover las mejores prácticas internacionales en la administración de los riesgos de inversión en beneficio de los asegurados. Asimismo, las próximas mejoras regulatorias abarcarán reglamentaciones específicas sobre la gestión de activos y pasivos, implementación de las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF 9) – IFRS 9, así como la implementación de un modelo de capital basado en riesgo, entre otras, que contribuyan a robustecer la solvencia de las aseguradoras.